Las regiones con mayor capital humano superan en 30 puntos porcentuales la productividad de aquellas con menor nivel
- Las comunidades de la mitad norte de España, incluyendo Madrid, se sitúan por encima del nivel educativo medio o de su entorno, mientras que el sur y el levante lo hacen por debajo de la media nacional, según el estudio sobre capital humano en las CC.AA
- Los años de escolarización pueden explicar un 80% de la variación en el PIB por persona en edad de trabajar, sin necesidad de tener en cuenta otras variables que recogen diferencias en la estructura productiva de las regiones
- El estudio señala que las diferencias regionales se han ido reduciendo pero hay señales preocupantes entre las generaciones más jóvenes de que las disparidades podrían volver a aumentar
BBVA Research y la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA) han presentado un estudio en el que analiza la evolución de los años de escolarización de las diferentes regiones de España y de la OCDE durante el último medio siglo y se ofrece un análisis preliminar de la relación entre esta variable y los niveles de renta por persona en edad de trabajar, la tasa de desempleo y la productividad. El informe concluye que a pesar de la importante mejora experimentada durante las últimas cinco décadas en el nivel educativo medio en España, nuestro país no ha salido de las últimas posiciones en relación a los países de la OCDE, en donde los avances educativos han sido también muy relevantes. A nivel interno, el informe observa diferencias importantes entre regiones, aunque éstas se han reducido significativamente en las últimas décadas. No obstante, los datos del último censo desagregados por tramos de edad sugieren que, de mantenerse los patrones actuales de escolarización y en ausencia de grandes flujos migratorios que compensen las diferencias existentes, las perspectivas de una mayor convergencia educativa entre regiones no son muy positivas a medio plazo, especialmente en el caso de los estudios universitarios.
El informe, presentado este jueves por Ángel de la Fuente, director ejecutivo de FEDEA, y Rafael Doménech, economista jefe de Economías Desarrolladas de BBVA Research, hace hincapié en que las diferencias educativas entre las distintas regiones en España son todavía importantes, aunque han mostrado una clara tendencia a ir reduciéndose.
Las comunidades de la mitad norte del país, incluyendo Madrid, se sitúan por encima del nivel educativo medio, mientras que el sur y el levante lo hacen por debajo de la media nacional. No obstante, las disparidades educativas se han reducido en un 52% entre 1960 y 2011.
Al comparar los años de escolarización de las comunidades autónomas con el que se observa en los 21 países de la OCDE para los que se dispone de datos homogéneos, regiones como Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura se situaban cerca de Portugal, con los menores años de escolarización de la población adulta, mientras que Madrid es la región que mejor compara internacionalmente.
El informe también explica que los niveles educativos de las comunidades autónomas españolas muestran una estrecha relación con sus niveles de renta, productividad y tasas de desempleo, lo que sugiere, junto con gran cantidad de otra evidencia, que el nivel educativo es un determinante crucial del crecimiento económico y del proceso de convergencia.
Mayor capital humano, mayor productividad
Las diferencias educativas entre las comunidades autónomas son muy relevantes tanto en términos económicos como sociales. Las regiones con un menor nivel de capital humano se caracterizan por presentar niveles de productividad que están en torno a 30 puntos porcentuales por debajo de los de las regiones con más capital humano, y por duplicar sus tasas de desempleo.
Todo ello da lugar a enormes diferencias en el PIB por persona en edad de trabajar, que también muestra una elevada correlación con los años de escolarización.
El informe destaca que estos resultados ponen de manifiesto la importancia de las diferencias regionales en años de escolarización y el elevado contenido informativo de la variable de capital humano. Incluso sin incluir diferencias en la calidad de los niveles educativos de la población adulta, los años de escolarización son capaces de explicar un 80% de la variación en el PIB por persona en edad de trabajar, sin necesidad de tener en cuenta otras variables que recogen diferencias en la estructura productiva de las regiones, el tamaño medio y grado de internacionalización de sus empresas o la intensidad en el uso del capital físico y tecnológico, entre otros factores.
El informe concluye que el proceso de convergencia educativa interregional que observamos en las últimas décadas continuará en el futuro en el caso de la educación secundaria y, especialmente, en el de su primer ciclo. Sin embargo, los datos de las generaciones más jóvenes no invitan a esperar una reducción significativa de las disparidades territoriales en términos de la fracción de población que al menos ha terminado el segundo ciclo de secundaria. A nivel universitario, la situación es incluso peor, ya que las disparidades interregionales podrían aumentar en un futuro entre un 20% y un 40%. Por lo tanto, de mantenerse los patrones actuales de escolarización y en ausencia de flujos migratorios que compensen las diferencias existentes, las perspectivas de una mayor convergencia educativa entre regiones respeto a los niveles actuales no son muy positivas a medio plazo.