- Las CCAA continúan inflando sus previsiones de ingresos, pero menos que en años anteriores.
- Tras su elevación al 0,7% del PIB, el objetivo de déficit de 2016 podría ser alcanzable con una gestión rigurosa del gasto gracias al fuerte incremento previsto de los ingresos del sistema de financiación autonómica.
Fedea publica hoy un nuevo informe de su Observatorio Fiscal y Financiero de las Comunidades Autónomas elaborado por Manuel Díaz y Carmen Marín. El trabajo analiza los factores responsables del incumplimiento de los presupuestos autonómicos de 2015 y cuestiona el realismo de los correspondientes a 2016.
Durante los últimos años, las CCAA han cuadrado sobre el papel sus presupuestos con sus objetivos de déficit a base de inflar sus previsiones de ingresos. A posteriori, estas previsiones han quedado muy lejos de cumplirse, provocando a su vez el incumplimiento de los objetivos de déficit. Este patrón se ha mantenido durante 2015. De la desviación observada en el ejercicio sobre el objetivo de déficit autonómico (unos 10.400 millones de euros), casi el 60% (6.100 millones) provino de unos ingresos inferiores a los presupuestados. El grueso del problema se concentra en las partidas de ingresos gestionadas directamente por las CC.AA. y no sujetas a entregas a cuenta y liquidaciones estatales, que aportaron algo más de 4.700 millones a la cifra anterior – una cantidad muy similar a la de 2014. Por el lado de los gastos, la desviación respecto al presupuesto aprobado fue de 3.425 millones de euros. En esta cifra juegan un papel importante los gastos extraordinarios ligados a la devolución de la paga extra de 2012 y a los nuevos tratamiento de la hepatitis C.
La previsión de ingresos recogida en los presupuestos autonómicos de 2016 también parece poco realista. Para este año, las CC.AA. han presupuestado unos ingresos no financieros superiores en unos 14.000 millones de euros a los realmente registrados en 2015. Algo más de la mitad de este incremento (7.460 millones) se debe al crecimiento previsto en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de las entregas a cuenta y liquidaciones de los recursos de dicho sistema, de los que en torno a dos terceras partes provienen de la liquidación de 2014 y podrían no consolidarse en el futuro. El resto del incremento previsto de ingresos, sin embargo, está sujeto a una incertidumbre mucho mayor. Así, las CC.AA. han previsto un incremento de casi 3.800 millones de euros en las partidas de ingreso no sujetas a liquidación. Aunque esta cifra supone una corrección significativa respecto a los 6.100 millones de 2015, los autores piensan que sigue estando sobrevalorada. Más arriesgada aún es la previsión de que los ingresos por entregas a cuenta y liquidaciones del sistema de financiación excederán en más de 2.700 millones los previstos por este concepto en los PGE. Esta cantidad proviene de Cataluña y la Comunidad Valenciana, que han incluido en sus presupuestos un anticipo sobre el Fondo de Competitividad que no está previsto ni en la ley de financiación regional ni en los PGE de 2016.
Los autores concluyen que parece evidente que las CC.AA. han sesgado nuevamente al alza el presupuesto de ingresos de 2016, aunque seguramente en menor medida que en 2015. De acuerdo con sus cálculos, el error de previsión por esta partida podría situarse en torno a un 0,60% del PIB, que sumado al déficit del 0,3% del PIB previsto en los presupuestos autonómicos dejaría a las CCAA en 2016 con un déficit que, de entrada, rondaría los 0,9 puntos del PIB. Puesto que esta cifra se sitúa sólo dos décimas por encima del nuevo objetivo de déficit del 0,7% del PIB, este último podría ser alcanzable con una gestión rigurosa del gasto.
Documento completo, véase:
Díaz, M. y C. Marín (2016). “Análisis de los Presupuestos de las CC.AA: cumplimiento 2015 y valoración 2016.” Fedea, Observatorio Fiscal y Financiero de las Comunidades Autónomas, Madrid.