En un trabajo reciente Fedea ha publicado datos para el período 2019-23 de los principales agregados económicos de la Seguridad Social Ampliada (SSA), un agregado que combina al Sistema de Seguridad Social con el de Clases Pasivas. Con el fin de ofrecer una mejor perspectiva sobre la evolución de las cuentas de un componente esencial del sistema de protección social, hoy publicamos la extensión hacia atrás de estas series hasta el año 2005. El trabajo va acompañado de un archivo de Excel con datos anuales sobre los ingresos y gastos del sistema y sus niveles de déficit y deuda, entre otras variables de interés.
Gráfico 1: Evolución de los gastos y los ingresos consolidados de la SSA
a. Miles de millones de euros de 2019
b. en % del PIB
Gráfico 2: Evolución del saldo presupuestario de la SSA
a. euros de 2019 por ocupado
b. en % del PIB
El Gráfico 1 muestra la evolución de los gastos del sistema y de sus ingresos, totales y netos de transferencias, en millones de euros constantes y en porcentaje del PIB y el Gráfico 2 la evolución de su déficit, también con y sin transferencias, desde 2005 a 2023. Durante este período, tanto los ingresos como los gastos de la SSA han crecido con fuerza, aumentando muy significativamente su peso en el PIB. Los ingresos, sin embargo, han crecido más despacio que los gastos, lo que se ha traducido en un importante deterioro del saldo presupuestario del sistema, que ha pasado de un superávit de 12.600 millones de euros (de 2019) en 2005 a un déficit esperado de 6.400 en 2023. Estas cifras, sin embargo, ofrecen una imagen un tanto engañosa de la evolución de la salud financiera del sistema pues el deterioro de su saldo presupuestario en base a sus recursos propios se ha mitigado mucho gracias al fuerte incremento de las transferencias del Estado. Si nos centramos en el déficit básico del sistema (el registrado antes de tales transferencias), el déficit habría aumentado en 61.000 millones de euros o 5 puntos de PIB entre 2005 y 2023, indicando que la brecha entre los gastos y los recursos “propios del sistema” ha aumentado dramáticamente, y con ella la carga que éste supone para la hacienda general del Estado, que ha de cubrir la brecha con recursos procedentes de impuestos generales, lo que reduce el margen disponible para atender otras necesidades. En la parte final del período, el déficit básico alcanza niveles preocupantes, en torno al 4% del PIB, lo que supone unos 2.500 euros anuales por trabajador ocupado.
Más información
de la Fuente, A. (2023). “Las cuentas de la Seguridad Social Ampliada, series 2005-2023, v1.0.” FEDEA, Estudios de Economía Española, no. 2023-27. Madrid.