Fedea publica hoy un nuevo número de la serie de documentos de trabajo dedicada a la I Jornada sobre el sistema público de pensiones y seguridad social. El trabajo ha sido preparado por Octavio Granado, ex Secretario de Estado de Seguridad Social.
El documento llama la atención sobre el papel que ha jugado en años recientes la Incapacidad Temporal en la evolución del gasto en prestaciones contributivas de la Seguridad Social, que no se limita a las pensiones.
El autor señala que en los últimos cinco años las pensiones contributivas del sistema han aumentado un 32,82% a precios corrientes, un porcentaje inferior al crecimiento de las cotizaciones sociales si incluimos las nuevas cotizaciones de solidaridad. Sin embargo, el gasto en prestaciones económicas derivadas de situaciones de incapacidad temporal motivadas por enfermedad común ha crecido un 91,61%, mientras la población atendida por el régimen prestacional ha crecido alrededor de un 10%.
En los medios de comunicación es frecuente encontrar hipótesis sobre las posibles explicaciones de esta situación. Las más frecuentes son los retrasos que sufren los ciudadanos como pacientes del sistema sanitario, el envejecimiento de la población activa y los efectos persistentes de la epidemia de COVID 19. Sin embargo, los datos no acaban de cuadrar con estas hipótesis. El tiempo de duración de los procesos de IT no aumenta. La esperanza de vida de los españoles sigue creciendo, y esto se debe entre otras cosas a que también crece cuando los ciudadanos están en activo. Y las consecuencias de la COVID 19 afectan tanto o más a los mayores de 65 años que a los trabajadores en activo. Por no mencionar que los procesos de incapacidad temporal derivados de enfermedad común crecen más en territorios dónde la población activa es más joven, o dónde puede encontrarse un cierto efecto de contagio por la existencia de colectivos con coeficientes reductores de la edad de jubilación u otras contingencias.
Por otra parte, la incapacidad temporal derivada de enfermedad común crece mucho más que la derivada de accidentes de trabajo o de enfermedades profesionales. También es cierto que los procesos gestionados por las Mutuas colaboradoras de la Seguridad Social crecen menos que los gestionados directamente por las entidades gestoras del sistema y que la disminución de la incidencia y duración media de los procesos se ha conseguido a veces con decisiones puramente regulatorias.
En el trabajo se analiza cuáles son las reformas que es necesario introducir en la configuración de la prestación y en la relación de las prestaciones de la Seguridad Social con el sistema sanitario para preservar la estabilidad financiera del sistema, así como los cambios culturales por parte de los agentes sociales que podrían ayudar a conseguir este objetivo.
Documento completo
Granado, O. (2024). “La incapacidad temporal, ausente en los documentos sobre la reforma del sistema de pensiones.” FEDEA, I Jornadas sobre el sistema público de pensiones y seguridad social. Estudios sobre la Economía Española no. 2024-20. Madrid.